Hoy te invito a visitar mi nuevo taller, mi refugio de paz.
Como sabes hace dos meses mi vida personal cambió, me casé y me mudé y desde entonces cada día es una nueva aventura.
Lo único es que no me mudé dos calles más abajo, o a otra ciudad cercana a Madrid, no, Brunelda se ha mudado a París. A la ciudad del amor, del arte, de la arquitectura, de rincones mágicos…
Desde siempre has leído como Brunelda viajaba a París de vez en cuando pero ya es un hecho, vivo aquí.
Esto “no cambia nada”, de hecho he intentado en todo momento que la mudanza y el cambio de país no afectase nunca el ritmo de Brunelda, pero a lo que me refiero es que “todo sigue igual”. La producción sigue siendo donde siempre, en casa, en Madrid, porque confío en nuestra marca Española y estoy más que encantada con los proveedores con los que trabaja Brunelda, vuestros productos siguen estando en mi taller-almacén de Madrid pero lo único que la cabeza pensante, las creaciones, las copas y todo lo demás desde hace un mes se crea en París, en este pequeño taller que hoy os enseño.
Lo que más me gusta de mi nuevo taller es el gran ventanal que tiene a nuestro pequeño jardín y lo cerca que estamos del Sena y de parques preciosos.
Y también, mi rincón favorito, ahora tan navideño pero lleno de objetos que me recuerdan a casa.
Brunelda va siempre evolucionando y creciendo al ritmo que yo lo voy haciendo es por eso que hoy quería presentaros este gran paso en esta aventura y como estoy segura de que todo va ir hacia arriba desde ahora.
Espero que os guste entrar en mi rincón, en el lugar donde creo y todo surge y que disfrutéis conmigo esta nueva aventura desde París.
Con cariño,